Diseñadas en un principio para contener agua, las botellas térmicas han ido evolucionado hasta convertirse en algo completamente distinto a sus prototipos originales y hoy en día están disponibles en diferentes formas, colores, tamaños y, sobre todo, con un sinfín de accesorios. Una de los más populares últimamente es el infusor, un pequeño accesorio adicional perfectamente integrado dentro de la botella de agua termal que permite un uso mucho más versátil.
Catálogo de botellas infusoras
¿Cómo utilizar el infusor de la botella?
Para aquellos que son muy aficionados a las infusiones, tener un infusor ya integrado dentro de su botella de agua termal puede ser una gran ventaja. Normalmente para preparar un té requiere de tiempo, primero hay que hervir el agua, luego verter las hierbas para el té o sumergir las bolsitas ya preparadas, esperar el tiempo de infusión adecuado y, finalmente, filtrar o extraer la bolsita. Pero.. ¿Y si tienes prisa?
La botella de agua infusora es tu mejor aliado si tienes un compromiso fuera de casa y quieres llevar tu infusión favorita pero, por diversas razones, no tienes tiempo de prepararla antes. Utilizándo el infusor no será necesario preparar de antemano el té, sino que bastará con calentar el agua y verterla en el frasco. Las hierbas pueden colocarse dentro del infusor. De este modo, el aroma se libera dentro del propio frasco y no es necesario esperar más para verter la infusión en su interior. Una vez que haya llegado a su destino, podrá abrir el frasco y disfrutar de su infusión como si estuviera recién preparada y, por supuesto, aún caliente.
¿Qué botella infusora elegir?
Dentro de las botellas con infusor integrado existen diferentes modelos. Es ideal que los conozcas para elegir la botella infusora más conveniente en función de tus necesidades. En primer lugar, tienes que calcular el tiempo que pasas fuera de casa porque de ello dependen dos características principales de la botella de agua termal: el tamaño y el material.
Para pequeños viajes puede ser suficiente una botella de agua muy pequeña, de unos 330ml, mientras que aquellos que quieran llevarla a la oficina, donde pasan la mitad del día, es recomendable una capacidad mayor, recomendamos unos 750ml.
Tener el cuenta el tamaño adecuado antes de comprar una botella infusora es importante para evitar problemas de que no sea suficiente la infusión para todo el tiempo que se está fuera de casa o, por el contrario, sea excesiva y, por lo tanto, se convierta en una carga innecesaria.
La elección del material también es importante, ya que influye en el peso de la botella con infusor: las de plástico son más ligeras que las de aluminio, acero inoxidable o vidrio. Además del peso, este factor afecta al tipo de bebidas que puede contener la botella de agua y, lo que es más importante, al intervalo de tiempo en que pueden mantenerse a la misma temperatura.